La Reserva Natural Estatal Valle del Orfento de Caramanico Terme es un paraíso inmerso en la naturaleza.
Mi novia y yo entramos casi de casualidad: habíamos cruzado la entrada de la reserva y estábamos caminando. El sendero es difícil y agotador, pero las vistas son impresionantes: hace que te sientas en el centro del mundo.
El camino sigue subiendo y bajando, entre puentes, ranuras rocosas, pajarillos que gorjean y paisajes increíbles. De vez en cuando nos encontramos con árboles caídos, piedras, nieve o pequeños torrentes que hacen el camino más difícil, pero no hay por qué preocuparse, eso es lo que convierte esta experiencia en una mucho más hermosa. Sólo hace falta tener cuidado de por dónde pisas: la ruta empieza desde muy arriba y poco a poco se baja siguiendo el río. Éste tiene unas vistas maravillosas: crea un sonido relajante y muy agradable, además hay muchas pequeñas cascadas que convierten este lugar en uno aún más fascinante. Poco después nos enteramos que los guardabosques organizan muchas excursiones. Es el lugar perfecto para los amantes de la aventura, de la paz y del bienestar. Yo lo aconsejo a todo aquel que quieran despejar su mente. Te informo de que no hay mucha cobertura de móvil, está completamente aislado, pero es una experiencia que hay que hacer puesto que, de vez en cuando, un poco de soledad sumergido por el verde sienta bien al alma y nos fortalece. La entrada se encuentra al lado de las termas del hotel “La Rèserve” y la salida en el puente de Caramanico. Probablemente volvamos.
Para concluir, Caramanico Terme es un pueblo tranquilo, típico, donde se puede beber agua sulfúrea y bañarse en las termas. Es una joya que no te puedes perder.
¡Buen paseo a todos!!
Autor: Luigi Greco
Fotos de Francesco Moscone via Flickr