Durmiendo en un pueblo antiguo de Italia

Imagínate estar alojado en un antiguo pueblo italiano, en donde el tiempo se ha detenido y puedas vivir una verdadera experiencia de integración en el territorio, durmiendo en casas típicas y no en cualquier habitación fría. El año 2017 ha sido nombrado el Año de los Pueblos de Italia, por lo tanto, el momento perfecto para pasar unas vacaciones en un Albergo Diffuso, para sentirse como en casa en estos lugares extraños pero encantadores, y volver a descubrir la típica atmósfera italiana. Por lo tanto, la idea de tener unas vacaciones durmiendo en un pueblo antiguo en Italia, se puede hacer realidad.

Durmiendo en un pueblo antiguo de Italia: ¿Qué es un Albergo Diffuso?

La primera vez que alguien utilizó el término Albergo Diffuso (literalmente hotel disperso) fue 1982: a continuación, este nuevo concepto de hospitalidad que surge en Italia “made in Italy“, cobró vida. Tendremos que esperar hasta 1994 para ver el primer y auténtico Albergo Diffuso, en el municipio de Sauris en Friuli Venezia Giulia. Los hoteles se caracterizan por ser un poco como un hogar de familia y un poco como un hotel, cuyos apartamentos están situados en el centro histórico, edificios que aún persisten por su autenticidad. El alojamiento está perfectamente integrado en el territorio, con la realidad social y cultura local.

Durmiendo en un pueblo antiguo entre las colinas de Marche

El Albergo Diffuso se está expandiendo tanto en Italia como en otros países, ya que es una idea que satisface muchas de las necesidades y deseos de los nuevos viajeros. Entre las colinas y el sonido del río Metauro en el fondo, se encuentra Casa Oliva, un pueblo medieval convertido en un Albergo Diffuso, equipado con todas las comodidades, desde una piscina a un restaurante: el lugar ideal donde pasar unas vacaciones, que además de auténticas son exclusivas para permanecer durmiendo en un pueblo antiguo de Italia.

Casa Oliva de Casa Oliva en Vimeo

La Casa Oliva es un alojamiento atípico, caracterizado por ser lujoso pero discreto, un perfecto lugar para vivir una experiencia única en un antiguo pueblo de Italia y pasar unas vacaciones románticas de relax.

Dentro del palacio antiguo y las paredes del castillo, existen 25 habitaciones entre dormitorios, suites junior y apartamentos, un fino restaurante, en donde se pueden disfrutar de platillos típicos hechos con los productos locales, un spa exclusivo con sauna, un cuarto de vapor, terapia de oxígeno, y hasta una zona de relajación y senderos naturales. El hotel se preocupa por el medio ambiente, por lo que utiliza energía de recursos renovables, productos de limpieza ecológicos, paneles solares para el agua caliente y bombillas de bajo consumo: características ideales para vacacionar durmiendo en un pueblo antiguo de Italia.

El edificio es imponente e impresionante, en una localidad encantadora sin igual, rodeada de campos de olivos, árboles de roble y colinas que forman parte del paisaje.

Durmiendo en un pueblo antiguo de Italia: ¿Qué hacer mientras uno se aloja en la Casa Oliva?

La Casa Oliva es el lugar perfecto para gozar de unos días de total relax, pero también tiene opciones de excursión y senderismo. El mar y la playa Fano, están a tan sólo 20 minutos en coche del riachuelo de Furlo , una hermosa reserva natural a lo largo de la antigua Via Flaminia. Para todos aquellos que aman andar sobre dos ruedas, pueden hacer uso del carril bici Metauro de 25 km, que va desde el riachuelo de Farlo a Tavernelle, pasando a través del antiguo pueblo de Fossombrone.

No podéis perderos Acqualagna, también conocida como la Capital Truffle, en la provincia Pesaro-Urbino, un pueblo antiguo de Italia, donde haciendo un recorrido por sus deliciosos sabores, el arte renacentista y la naturaleza libre de contamitación, se descubrirán lugares fascinantes.

Paisaje alrededor de la Casa Oliva, Albergo Diffuso en un antiguo pueblo en la región de Marche, Italia